¿Has pensado alguna vez en practicar sexo anal? No es de extrañar, ya que tanto mujeres como hombres pueden disfrutar de intensos orgasmos y placer sexual con esta práctica. ¿Pero qué se debe tener en cuenta al tener sexo anal por primera vez? Te proporcionamos un buen resumen sobre el tema y te ofrecemos algunos consejos sobre el sexo anal para principiantes.
El sexo anal está de moda
Sí, lo habéis oído bien. Y no solo entre hombres, como tal vez se pueda pensar. Cada vez más mujeres descubren el sexo anal, algo que incluso muestra un estudio realizado en Estados Unidos y publicado en The Journal of Sexual Medicine: alrededor del 40 por ciento de las mujeres de entre 20 y 24 años ya han probado el sexo anal. En 1992 eran solo un 16 por ciento.
Cada vez más personas hablan de los intensos orgasmos anales que experimentan gracias a esta práctica. El ano está rodeado de terminaciones nerviosas, al igual que el clítoris. Además, en las mujeres se estimula de forma indirecta el punto G entre el recto y la vagina y en los hombres la próstata. Entonces, ¿por qué no probarlo?
La primera vez anal: ¡ignora los mitos!
Quienes tengan curiosidad por el sexo anal para principiantes tal vez se sientan intimidados por algunos mitos. ¡Hay unos cuantos! Por ello, el primer paso para disfrutar del sexo anal por primera vez es informarse bien. ¿Tal vez también quieres contarle a tu pareja que te gustaría probar el sexo anal pero no sabes cómo decírselo? Aquí os hemos preparado unos buenos consejos para iniciar el diálogo.
No te preocupes por el dolor durante el sexo anal
Solo si tu compañero (o compañera, si utiliza un arnés) es imprudente puedes sentir dolor. Precisamente la primera vez que probéis el sexo anal es importante avanzar con cuidado y prepararse bien. Tened también a mano suficiente lubricante. Cuanto más mejor, ya que el ano, a diferencia de la vagina, no produce ninguna humedad. Por ello es necesario proporcionarle una ayuda adicional.
También son útiles algunos juguetes anales, como Vector o Ditto de We-Vibe. Con estos plugs anales podréis dilatar previamente esta región tan sensible del cuerpo. Y aún hay más: Vector y Ditto te darán placer con excitantes y suaves vibraciones.
No! El sexo anal no es algo sucio
A muchos principiantes les preocupa que las cosas se puedan poner sucias durante el acto. Y es cierto: siempre puede ocurrir, ya que en el recto hay excrementos. No obstante, esto solo es así inmediatamente antes de la defecación. Por tanto, si no tienes ganas de ir al baño, el sexo anal no será sucio ni repugnante.
Sin embargo, si tenéis sexo anal y después continuáis con sexo vaginal, siempre es aconsejable que os limpiéis antes de seguir. La razón: de lo contrario, las bacterias intestinales podrían causar infecciones en la vagina, como una infección de vejiga. El condón también debe cambiarse entre el sexo anal y el vaginal.
Siempre es mejor usar condones
Si vuestra relación aún no es estable, usar condones es sin duda aconsejable durante el sexo anal. Así podréis reducir al mínimo el riesgo de infección por una enfermedad de transmisión sexual.
El sexo anal no cambia la anatomía del ano
El esfínter es un músculo muy fuerte. Por tanto, no tienes que preocuparte de que el ano se vea afectado por el sexo anal frecuente. No obstante, con el tiempo el esfínter se puede acostumbrar a la presión y relajarse más rápidamente, algo que solo tiene efectos positivos y no debería preocuparos en ningún caso.
Cualquier persona puede disfrutar de la estimulación anal
A pesar de que algunos hombres heterosexuales piensen que el sexo anal es solo para hombres homosexuales, esto obviamente no es así. El sexo anal puede dar mucho placer tanto a hombres como a mujeres, y las parejas heterosexuales también lo practican. Actualmente hay muchas mujeres y hombres heterosexuales que disfrutan de la estimulación anal tanto como los hombres homosexuales. Ni tu orientación sexual ni tu sexo deberían impedirte probar el sexo anal, siempre y cuando sientas curiosidad.
Sexo anal para principiantes: los consejos más importantes
Lo más importante durante el sexo anal: la preparación. Cuando quieras tener sexo anal con tu pareja, debéis hablar previamente sobre vuestros deseos y necesidades. Si no sois capaces de formularlos, podéis hacer pruebas. Esto es algo que puedes hacer en solitario o con tu pareja: explora con tu dedo y observa qué te gusta y qué no.
1: Daos una ducha rápida
Si ya ha llegado el momento y queréis probar el sexo anal en pareja, es necesaria una buena higiene. Daos una ducha y poneos a tono bajo el chorro de agua caliente. Así no solo evitaréis olores desagradables sino que os aseguraréis de que la otra persona disfrute de una sensación placentera. También debes escuchar a tu cuerpo: si no tienes una necesidad inmediata de ir al baño, todo va bien. Si lo deseas, también puedes recurrir a las duchas anales. Así limpiaréis la parte interior del ano suavemente. Pero tal vez esto sea demasiado para la primera vez que probéis el sexo anal. Por lo general, una ducha o un baño corto son suficientes.
2: ¡Utilizad lubricante!
Ahora estirad el ano un poco, tanto con el dedo como con un juguete. El lubricante es absolutamente necesario, ya que el ano, al contrario que la vagina, no se humedece. El lubricante a base de agua es el producto más apropiado, ya que es respetuoso con las mucosas y se puede utilizar con juguetes o condones de látex.
3: Habla con tu pareja
¿Os encontráis bien? Entonces podéis empezar. No obstante, el mandamiento más importante en el sexo anal es: ¡tomaos vuestro tiempo! Al principio, la sensación puede ser algo extraña, por lo que es totalmente aconsejable que vuestra pareja, tanto si es un hombre como si es una mujer con un arnés, os penetre lentamente. También podéis interrumpir el juego anal de vez en cuando, masajear suavemente el exterior del ano con los dedos o incluso usar la lengua para estimular esta región tan sensible y, al mismo tiempo, proporcionar relajación.
Tened siempre en cuenta las necesidades y los deseos de vuestra pareja. Hablad durante el sexo y, si algo no os gusta, simplemente decid «Para». Mostrad comprensión hacia la otra persona y no forcéis nada: esto es lo más importante.
¿Y después?
Si es la primera vez que habéis practicado sexo anal, os aconsejamos que os abracéis y acariciéis cuando hayáis acabado. Mostraos cercanía y amor para que ninguna de las dos partes tenga la sensación de haber sido «usada». Además, es conveniente que después habléis abiertamente: ¿os ha gustado? ¿Qué fue lo que os gustó? ¿Qué queréis probar la próxima vez? ¿Qué os gustaría cambiar? En este momento, también es recomendable que os preocupéis por la higiene. Lo ideal es que, al acabar, lavéis la región con agua templada y volváis a acurrucaros juntos…